En un mundo donde las enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión y el hígado graso son cada vez más comunes, la importancia de una alimentación balanceada se vuelve esencial. Aunque parezca sencillo, llevar una dieta equilibrada es un desafío diario, complicado por la falta de tiempo y una desinformación general sobre los alimentos benéficos para nuestra salud. Aquí es donde entra en juego un superalimento poco reconocido: el aceite de aguacate. Este verdadero “oro verde” ha capturado la atención de la comunidad científica debido a sus notables beneficios. Con un alto contenido en grasas benéficas para la salud, vitaminas y antioxidantes, el aceite de aguacate no solo es un aliado en la cocina, sino también en nuestra lucha contra las enfermedades crónicas. Este artículo explora cómo el aceite de aguacate puede ser un componente clave en nuestra dieta diaria, ofreciendo una solución natural y accesible para mejorar nuestra salud y disminuir la severidad de las complicaciones de enfermedades crónicas a largo plazo. Acompáñanos en este viaje para descubrir los secretos del aceite de aguacate y cómo puede ayudarnos a llevar una vida más sana.
Palabras clave: Aceite de aguacate; diabetes mellitus; antioxidantes
In a world where chronic diseases such as diabetes, hypertension, and fatty liver are increasingly common, the importance of a balanced diet becomes essential. It may seem simple, however maintaining a well-balanced diet is a daily challenge which can be complicated by the lack of time and general misinformation about health-beneficial foods. This is where a little-recognized superfood comes into play: avocado oil. This true “green gold” has captured the attention of the scientific community due to its remarkable health properties. It is high in healthy fats in, vitamins, and antioxidants. Avocado oil is not only an ally in the kitchen but also in our fight against chronic diseases. This article explores how avocado oil can be a key component in our daily diet, offering a natural and accessible solution to improve our health and prevent long-term complications of chronic diseases. Join us on this journey to uncover the secrets of avocado oil and how it can help us to achieve a healthier life.
Keywords: Avocado oil; diabetes mellitus; antioxidants
El aguacate, esa delicia cremosa apreciada en cocinas de todo el mundo, no solo es un tesoro culinario, sino que su aceite es un auténtico “oro verde”. En la actualidad, el aguacate se ha ganado un lugar de honor en la dieta global, no sólo por su sabor único y versatilidad, sino también por su reputación como superalimento. Con más de 10,000 años de historia, el aguacate ha sido altamente valorado en diversas culturas, pero es en México, y más específicamente en Michoacán, donde este fruto alcanza su máxima expresión. Michoacán no solo es el principal productor de aguacate a nivel mundial, sino que también es reconocido por exportar aguacates de la más alta calidad. Esta fruta que ha formado parte de la alimentación y la cultura mexicana desde tiempos ancestrales, se ha convertido en un símbolo de orgullo y un importante motor económico para la región. La riqueza del aceite de aguacate reside en su impresionante perfil nutricional. Este aceite es una fuente notable de grasas saludables, las llamadas grasas monoinsaturadas, como por ejemplo, el ácido oleico, a este respecto, el aceite de aguacate está a un nivel semejante de otro aceite considerado superalimento, el aceite de oliva. Además de que contiene vitaminas y minerales, lo más destacable es una abundancia fuera de serie de antioxidantes; estos componentes no solo contribuyen a una alimentación saludable, sino que también nos ayudan a combatir y prevenir enfermedades crónicas como la diabetes, el hígado graso y la hipertensión (Figura 1) (Cervantes-Paz & Yahia, 2021; Chin, 2019).
Por otro lado, los efectos del aguacate han demostrado no solo combatir este tipo de enfermedades, se han reportado también efectos antimicrobianos, antiinflamatorios y antioxidantes (Morelosy Hernández, 2019), sin embargo, el efecto únicamente del aceite del aguacate, se ha estudiado poco en humanos y su efecto sobre enfermedades como el cáncer, la diabetes y enfermedades cardiovasculares se ha demostrado fundamentalmente mediante estudios in vitro y en animales (Cervantes-Paz & Yahia, 2021). De hecho, uno de los pocos estudios en humanos se llevó a cabo utilizando el producto comercial Piascledine® en pacientes con osteoartritis. Dicho fármaco, es una combinación de compuestos activos del aguacate y soya, el cual demostró reducir el dolor y mejorar la movilidad en pacientes con este padecimiento (Cameron y Chrubasik, 2014; Al-Afify et al,. 2018). Por esta razón, es necesario continuar con investigaciones más extensas para conocer los efectos del aceite de aguacate en enfermedades crónicas en humanos.
La presente revisión se centra en el efecto del aceite de aguacate y lo que se estudiado hasta el presente año con la finalidad de subrayar el potencial terapéutico de su aceite, un derivado que concentra las propiedades saludables del fruto en una forma versátil y accesible para el consumo diario. Al adentrarnos en este viaje, descubriremos cómo el aceite de aguacate ha evolucionado desde ser un simple ingrediente hasta convertirse en un pilar de la nutrición moderna y un aliado en la promoción de un estilo de vida saludable.
La diabetes es una enfermedad en la que el cuerpo tiene problemas para manejar el azúcar que obtenemos de los alimentos; seguramente algún familiar o conocido tuyo padece esta enfermedad que parece ir en aumento de manera descontrolada, y es que tan solo en nuestro país, 10.3% de la población mayor a 20 años reportaron contar con un diagnóstico médico previo de diabetes mellitus (INEGI, 2021). Existen investigaciones que han arrojado luz sobre cómo el aceite de aguacate puede mejorar la sensibilidad a la insulina, un factor clave para controlar la diabetes. Es el caso de una investigación realizada en un modelo de roedores en donde se demostró que el aceite de aguacate disminuye la resistencia a la insulina y ayuda en el control de los niveles de azúcar en sangre (Del Toro-Equihua et al., 2016). En otra investigación se demostró que la suplementación de aceite de aguacate disminuye la inflamación, la resistencia a la insulina y los radicales libres en un modelo de roedores (Oliveira et al., 2022)
La hipertensión ocurre cuando la presión de la sangre en las arterias es más alta de lo normal, similar a como cuando el agua corre por una manguera con demasiada presión. Este problema es muy frecuente en personas que tienen diabetes; el aceite de aguacate también ha demostrado ser beneficioso en la lucha contra esta enfermedad. En estudios utilizando modelos animales se encontró que ayuda a regular la presión arterial y mejora la vasodilatación renal debido a su alto contenido en ácido oleico (Márquez-Ramírez et al., 2021), ofreciendo un método natural y un gran aliado para combatir esta condición ya que incluso se ha comparado su efecto contra el losartan, un fármaco utilizado para combatir la hipertensión, y ha demostrado tener efectos similares sobre la presión arterial (Márquez-Ramírez et al., 2018).
El impacto del aceite de aguacate en el hígado graso es otra área de interés y es que se estima que entre un 20 a 30% de la población mundial presenta hígado graso. Esto ocurre cuando se acumula un exceso de grasa en el hígado que puede llegar a inflamarlo y hasta provocar hasta cirrosis y en el menor de los casos, hepartocarcinoma celular; la obesidad y la diabetes mellitus son condiciones que se asocian con este padecimiento (GobMx, 2016). Se ha comprobado que el aceite de aguacate ayuda a reducir la inflamación del hígado y los niveles de colesterol y triglicéridos en roedores con hígado graso. Estos beneficios también fueron acompañados por un mejor control en los niveles de glucosa en sangre (García-Berumen. et al., 2022), lo cual ha demostrado tener un efecto protector del hígado (Sari et al., 2023)
México se ha convertido en el primer productor y exportador de aguacate a nivel internacional y Michoacán es el estado que más aguacates produce: aporta además cuatro quintas partes del total nacional de la producción de este fruto (GobMx, 2016). Aquí, el aguacate no solo es un cultivo; es una fuente vital de economía y orgullo. El aguacate michoacano es conocido por su calidad y características únicas, lo que lo hace particularmente valioso tanto en el mercado local como el internacional.
A pesar de sus beneficios, el mercado del aceite de aguacate enfrenta un desafío enorme: la adulteración y el mal etiquetado. Esta mala práctica no solo es un tema de utilizar ingredientes baratos, sino que también puede tener impactos negativos en la salud. En el año 2023, científicos pertenecientes a la Escuela de Ingeniería y Ciencias del Tecnológico de Monterrey, Campus Monterrey, analizaron 12 marcas de aceite de aguacate comercializadas en el mercado mexicano. El estudio reveló que solo 5 marcas (Figura 2) cumplen con los lineamientos del perfil ácidos grasos y los requisitos de etiquetado nutrimental obligatorio establecidos en la Norma Oficial Mexicana NOM-051-SCFI/SSA1, la cual indica las especificaciones generales de etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados-Información comercial y sanitaria (Patiño-González et al., 2024).
Tomando esto en cuenta es importante aumentar la regulación y pruebas de calidad para proteger a los consumidores y garantizar que obtengan los beneficios reales del aceite de aguacate
El aceite de aguacate no es solo un producto; es una promesa de un futuro más saludable. La mayoría de los efectos benéficos se ha demostrado en estudios in vitro y en modelos animales, sin embargo, las investigaciones realizadas en humanos son muy escasas, por esa razón es vital continuar la investigación, mejorar las regulaciones y aumentar la conciencia sobre la importancia y los beneficios de este "oro verde". Así, no solo estaremos protegiendo nuestra salud, sino también apoyando una economía local vital y sostenible.